Cualquier acción espontanea implica trabajo, así como nunca podemos estar seguros de las respuestas y de las reacciones, sin espontaneidad, la vida se vuelve insípida, caótica y la creatividad es casi imposible.

​Paloma empieza su trabajo con grandes gestos espontáneos, confiando en su energía y su vitalidad para que le sugieran como proceder, como encontrar orden en esta vitalidad, y tal vez imágenes que surgen de este ataque energético. Unifica lo espontaneo con la contemplación, la energía con el refinamiento y la deliberación, la acción con el misterio del descubrimiento, la oportunidad con la composición.

​Fuerza sin sutileza y refinamiento, fácilmente se vuelve brutal; refinamiento y sutileza sin fuerza se vuelve decadente. La combinación de la fuerza con la sensual sutileza produce una calidad dinamica. Ella parece poseer un sentido innato de esta unidad dinámica, y la intensidad de percepcion y expresion que esto requiere. Su desarrollo ha sido hasta el momento extraordinario.
​Cuando el arte y la vida se vuelven uno, cosa que creo que existe en Paloma, el espiritu creativo nunca llega a un final. Arte, en este sentido, se convierte en la constante transformacion de la vida.

Robin Bond